La imaginación del ser humano puede llegar en ocasiones a traspasar la realidad, sueñas, creas con tu mente mesas llenas de flores, dibujas, haces listas y más listas de cosas que probablemente acaben en una papelera, pero llega un día que… todo se vuelve realidad. ¿Y tú como imaginas tu boda?
Y llega un día que de todo sucede, todo aquello que has imaginado va cogiendo forma, tienes que buscar proveedores, elegir manteles, sillas, mesas de todo tipo de dimensiones para que tus 20 íntimos amigos puedan sentarse juntos, decides menús que agraden a todo el mundo y con el que esperas que los que vienen de otra provincia digan: madre mía qué bien hemos comido!
Son meses de mucha tensión a la que mucha gente no está acostumbrada y no disfruta de cada momento, como ese momento que parece un infierno mientras decides (o más bien discutes con tu novio/a) si invitas al íntimo amigo del bufete de tu padre o a los hijos de tu tía abuela política, ese momento es irrepetible.
Te planteas si necesitas un coro, o incluso una orquesta! Se te ocurre que si alguien puso música en directo en el coctel, tú vas a poner un concierto de una banda de rock! Además de cervezas, mojitos, vermut, en tu boda no puede faltar Jägermeister y eso acaba de ponerse a la cabeza de las listas juntos con las bailarinas para que las chicas lo den todo!
Si, ese día llega y de repente te encuentras sin tiempo, saturado e impresionado por el coste de cada cosa. Posiblemente necesites alguien que te eche un cable. Seguramente te planteas si ¿es rentable contratar este servicio? si tú tienes claras tus ideas ¿en qué te van ayudar?
Un equipo que te ayude en la toma de decisiones, en la organización durante los meses previos además de disfrutar al 100% del día sin agobios ni tensiones innecesarias. Convertir en realidad la visión que tienes o todas esas ideas que no sabes bien como poner en orden, o simplemente coordinar proveedores y logística, nosotras estamos para eso.
Aunque lo más importante y que todo el mundo debe tener presente es llega un día que te comprometes con alguien, un día que decides que ya no hay medias naranjas ni almas gemelas sino sólo esa persona con la que vivir y compartir todo para siempre.
Y llega un día que… sucede.